DrJCcm180
La curcuma es un fitonutriente altamente promisorio con propiedades inmunomoduladoras, además de demostrar su potencial en la prevención y tratamiento de diversas patologías. Fabricado con las estrictas directrices del Dr. Cvitanovic. Envase de 180 cápsulas para 3 meses.
Marca: Dr. Juan Cvitanovic
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La cúrcuma es rica en curcumina, el compuesto activo. Cuando ingiere la cápsula se descompone en el estómago y el intestino delgado y lo hace mejor cuando se ingiere con alimentos. Como la Curcumina es liposoluble (se disuelve en grasa) es aconsejable usar un poco de aceite de oliva junto a su comida. La Curcumina absorbida es transforma luego en metabolitos en el higado. Estos metabolitos son los que tienen las propiedades beneficiosas para el organismo y se distribuyen por todo el cuerpo a través del torrente sanguíneo.
La cúrcuma, y en particular su componente activo la curcumina, ha sido objeto de numerosos estudios en la ciencia y la naturopatía debido a sus beneficios para la salud.
Sus múltiples beneficios incluyen:
Propiedades antiinflamatorias: La curcumina es conocida por su capacidad para reducir la inflamación en el cuerpo. Se ha estudiado en afecciones inflamatorias como la artritis y la enfermedad inflamatoria intestinal. La Curcumina, o sus metabolitos, interactuar con diversas moléculas y rutas de señalización en el cuerpo. Esto incluye la inhibición de las vías inflamatorias, como el factor nuclear kappa B (NF-kB) que reduce la producción de citocinas proinflamatorias y, en consecuencia, disminuye la inflamación en el cuerpo.
Acción antioxidante: La curcumina es un antioxidante natural que puede neutralizar los radicales libres, evitando el daño oxidativo a las células y las moléculas biológicas. Protegiendo asi las células contra el daño causado por los radicales libres.
Interacción con células dañinas: Se ha estudiado la curcumina por su capacidad para afectar la proliferación de células dañinas e inducir la apoptosis (muerte celular programada) en ciertos tipos de celulas dañinas.
Mejora de la digestión: La curcumina puede estimular la producción de bilis por parte del hígado. La bilis es importante para descomponer las grasas y mejorar la digestión.
Modulación del sistema inmunológico: La curcumina puede influir en la actividad de las células del sistema inmunológico, lo que podría ayudar en la defensa del organismo contra infecciones y enfermedades.
Neuroprotección: Se han investigado los efectos de la curcumina en la prevención de enfermedades neurodegenerativas ya que puede cruzar la barrera hematoencefálica y ejercer propiedades neuroprotectoras.
Refuerza el salud ocular: La curcumina es conocida por su capacidad antioxidante, lo que significa que puede ayudar a proteger las células de los ojos contra el daño causado por los radicales libres. Esto podría ser beneficioso para prevenir o retrasar condiciones oculares relacionadas con el envejecimiento, como la degeneración macular. La inflamación crónica puede contribuir a problemas oculares como la uveítis y la retinopatía diabética y la curcumina tiene propiedades antiinflamatorias que podrían ayudar a reducir estos problemas y la inflamación en los ojos. Aunque se necesita más investigación, algunos estudios han explorado el potencial de la curcumina en el tratamiento complementario de ciertas enfermedades oculares, como el síndrome de ojo seco.
Protege el higado: El hígado es un órgano clave en el metabolismo y desintoxicación del cuerpo, y a menudo está expuesto a sustancias que pueden generar radicales libres. La curcumina puede ayudar a neutralizar estos radicales libres y proteger las células hepáticas de daños. La inflamación crónica del hígado, como la que se produce en enfermedades hepáticas como la esteatosis hepática no alcohólica (EHNA) o la hepatitis, puede llevar a la fibrosis hepática y el daño hepático. La curcumina tiene propiedades antiinflamatorias que podrían reducir la inflamación en el hígado y prevenir el daño hepático relacionado. La cúrcuma también puede estimular la producción de bilis, que es importante para la digestión de las grasas y la eliminación de desechos del cuerpo. Esto puede mejorar la función hepática y la digestión. Se han realizado investigaciones que sugieren que la curcumina puede ayudar a prevenir enfermedades hepáticas, como la esteatosis hepática no alcohólica (EHNA) y la cirrosis, al reducir la acumulación de grasa y la fibrosis en el hígado. Algunos estudios han indicado que la curcumina puede mejorar la función hepática en personas con enfermedades hepáticas crónicas al reducir los marcadores de daño hepático y mejorar las pruebas de función hepática.
Cada cápsula contiene:
500mg de Extracto seco de Cúrcuma, curcumina activa de alta pureza.
Tomar 1 cápsula con una comida, 2 veces al día.
NOTA: La Información esta destinada solo con fines educativos y de investigación y no pretende prescribir, prevenir, tratar o curar dolencias o enfermedades.
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